Entrar en una nueva etapa de estudios puede ser intimidante. Sin embargo, con la mentalidad y los conocimientos adecuados, cursar una maestría puede ser extremadamente gratificante y un gran logro en tu CV.
¿Estás a punto de empezar tu máster o acabas de empezarlo? Consulta estos consejos para estudiantes de maestría.
Piensa como un novato
Al comenzar tus estudios de posgrado, tu situación social cambiará. Incluso si continúas en la misma universidad en la que hiciste tu licenciatura.
Lo más probable es que tengas que reconstruir gran parte de tu círculo social, en el que las primeras semanas serán clave. En general, lo más probable es que te ayude participar en el mayor número posible de actividades, pues será una gran oportunidad para relacionarte con gente nueva.
Habla activamente con personas de tu campo de estudio. Durante el primer mes de estudios, la mayoría de la gente estará en el mismo barco, con ganas de hacer nuevos amigos.
Asegúrate de establecer una red de contactos y forjar algunos vínculos sociales tempranos mientras todo el mundo está receptivo. De hecho, ofrece la oportunidad de tener un “compañero de estudios” en el futuro cuando llegue la temporada de evaluaciones.
Estructura tu tiempo
Al cursar una maestría, no importa si son maestrias para administracion de empresas o relacionadas con el campo de las artes, siempre habrá una gran cantidad de lecturas que hay que leer. Es una buena opción que planifique tus lecturas con días de antelación y dividas las secciones en diferentes horarios, ya que la mayoría de los seres mortales no podemos procesar 150 páginas de artículos de revistas en una sola sesión, y no basta con leer la introducción y la conclusión.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que leerás mucho más despacio que con la lectura ocasional y, sobre todo, cuando tomes notas. Algunas personas prefieren asignar un tiempo fijo de lectura, por ejemplo, de dos a tres horas al día.
Un enfoque basado en los logros, en el que se alcanza un objetivo fijo, puede dar un cierre efectivo y evitar que te preocupes por el trabajo durante el resto del día.
Descubre cómo aprendes mejor
Seguramente sabrás qué tipo de alumno eres. Algunas personas prefieren aprender a través de conferencias, lecturas o participando activamente en seminarios.
Si bien es posible que ya tengas algunas estrategias de trabajo identificadas, lo más probable es que se vuelvan inadecuadas a medida que curses la maestría.
La cantidad de información que tendrás que procesar y comprender requiere que entiendas cómo aprendes mejor. No querrás dedicar tiempo a un método de aprendizaje que tiene un rendimiento limitado.
A algunas personas les gustan los mapas mentales, las tarjetas de memoria, el subrayado o el trabajo con lápiz y papel, ya que pueden ayudarles a absorber mejor el contenido. Muchos de estos métodos pueden clasificarse en cuatro categorías: Auditivo, Visual, Escrito o Kinestésico.
Saber cómo aprendes mejor, puede ayudarte a desarrollar tus habilidades de estudio y a trabajar de forma más productiva.
Ten en cuenta tu futura carrera profesional
Tanto si has empezado la maestría como si ya vas a estudiar un doctorado o estás a punto de terminar la universidad, la inexorable pregunta de cuál será tu carrera sigue vigente. Es bueno dedicar un tiempo en la semana a su desarrollo.
Sigue las industrias clave que te interesan y haz todo lo posible por relacionarte con personas relacionadas con esos sectores. Podrían ofrecerte ideas clave o ayuda en el futuro.
Comprueba los requisitos clave de empleabilidad que especifican muchas ofertas de trabajo. Pregúntate si respondes a ellos de forma convincente: ¿necesitas experiencia adicional en determinadas áreas?
